Aunque el verano aún no ha finalizado, ya son muchos los profesionales que se han incorporado al trabajo tras el merecido periodo vacacional. Tras unos días de descanso y desconexión, es hora que regresar a la clínica dental y poner de nuevo orden para comenzar una nueva etapa.
Si eres de los que sufre del famoso Síndrome Post-vacacional, aquí te dejamos algunos consejos para afrontar el nuevo “curso” con ilusión y gestionar eficientemente el regreso del equipo a la rutina.
Periodo de adaptación
Tras el periodo de descanso es habitual volver al trabajo sin estar al 100% en el minuto uno. Concédete a ti mismo y a tu equipo un pequeño tiempo de acomodación a la rutina. Es aconsejable no llenar la agenda de pacientes el primer día con el ánimo de recuperar el tiempo de trabajo “perdido” durante el verano.
Objetivos a corto plazo
En ocasiones en vacaciones, con el descanso que disfrutamos, tendemos a pensar en nuevas y grandes ideas para mejorar la calidad del trabajo o aumentarlo. Si bien la premisa es adecuada y no debe quedarse en la maleta al llegar, elaborar planes a largo plazo puede llevarnos al desánimo al volver a la clínica y enfrentarnos a la realidad. Establece metas de trabajo más próximas y alcanzables, de cumplimiento más o menos sencillo que te motive tanto a ti como al equipo y refuerce las ganas de continuar trabajando y mejorando el servicio a los pacientes.
Evita la sobrecarga
Si bien es normal querer empezar de nuevo el trabajo dando el máximo de uno mismo, es muy habitual caer la sobrecarga. Sobrecargar el regreso a la clínica dental planificando tareas y retos puede derivar en una sensación de descontrol al no poder ejecutarlo todo, pudiendo llegar incluso al bloqueo. Planifica unos primeros días más relajados, que te permitan realizar las tareas más urgentes sin tener que posponer demasiadas por haber cargado demasiado la agenda. Sé consciente de tus propios límites y los de tu equipo.
Planificación y prioriazación de las tareas
Como director de la clínica dental, la planificación es tu mejor aliada tras las vacaciones. Realiza una planificación de la agenda para los próximos días y semanas, donde se vean reflejadas todas las tareas que han de llevarse a cabo, en función de la importancia y prioridad de realizarlas. Así mismo, establece un periodo razonable para que se cumplan y planifica paso a paso su ejecución, pues de esta manera ahorrarás tiempo y esfuerzo, mientras disminuyes el margen de incumplimiento y el riesgo de aumento del estrés nada más empezar.
Cuida de tu salud
La actitud es muy importante en estos momentos, pues de ella depende en gran medida cómo vivir y terminar estos primeros días de vuelta a la rutina. Dedícate tiempo de calidad a ti mismo para no caer en situaciones de estrés nada más llegar. Practicar un deporte que te guste es el mejor antídoto para ellos y mejorar el ánimo, lo que repercutirá de forma positiva en tu rendimiento. Es igualmente importante seguir una dieta sana y equilibrada que te proporcione las fuerzas necesarias para trabajar y estar motivado, lo que te llevará a ser más productivo. El periodo de descanso también es fundamental, planifica tus horas de sueño para comenzar los días con energía.
Estas claves te ayudarán a volver al trabajo cargado de ilusión y afrontar con positivismo los primeros días. ¡Mucho ánimo!.